¡Voilà!

Hoy, una de las Magnolias de Acero, me ha telefoneado para compartir una alegría.
Alegría sobre todo para ella, pero que yo comparto y deseo haceros copartícipes, por si también podéis alegraros.
A ella, cuando tenía la edad adecuada para estar escolarizada, no "le gustaba mucho" estudiar, decían sus profesores y los de su entorno, de modo que nadie pensó en si existían algunos motivos o causa para ello y ver si se podía cambiar las condiciones o ayudarla en las carencias que tuviese. Claro que hablamos de los años 60 del siglo pasado, en que "si no sirves para estudiar ¡ a trabajar !" de modo que a los catorce años ya estaba trabajando,  en esa época se podía legalmente trabajar a esa edad, y muchos lo hicimos. La situación económica del país no era tan crítica como ahora, era mucho peor.
a lo largo de su vida ha ido adquiriendo una cultura y unos conocimientos de forma autodidacta, que ninguno que no la conozca podrá decir que es una ignorante, tiene un rico vocabulario que emplea con total acierto y sobre todo tiene una altísima dosis de sentido común y prudencia para no meter la pata dando a entender que entiende de lo que no entiende. (Disculpar las redundancias).
Bien al grano. Durante los últimos meses y ya tiene algunos años, (podría ser abuela, por la edad de sus hijos, todos Universitarios por el empeño de su madre y de su padre algo tambien, que no se ponga celoso) habiendose quedado sin trabajo, pensó en que podía volver a empezar. inició unos estudios que le posibilitan acceder a un Módulo Ocupacional de Grado Superior. Solo ella y Dios, saben lo que realmente le ha costado. La voluntad que ha tenido que poner. El esfuerzo que ha tenido que hacer. Como ha tenido que vencer las tentaciones de abandonar en el camino. Que autoestimulos ha tenido que ponerse para seguir en el empeño... Incluso como superar las "ironías" de  los bien pensantes que comentaban su proeza...
Y ¡Voilà!,  ves por dónde, hoy le han comunicado el resultado del examen que debió pasar con un tribunal académico que no eran sus profesores, y el NOTABLE que ha obtenido tras la corrección del mismo y las calificaciones oportunas.
Mi amiga, una de Las Magnolias de Acero está rebosante de alegría, se ha superado así misma y a sus años tiene la ilusión de empezar de nuevo como si la vida no hubiese pasado...
...en realidad hasta el final, la vida no ha pasado y cabe mucho dentro de ella, solo es preciso que queramos llenarla de contenido.
Con mi cariño y apoyo:

"¡¡¡ Como Magnolia de Acero, tú puedes mucho !!!"