jueves, 21 de junio de 2012

III.-Los Planes de Rescate


Siguiendo con el anterior post:
Se crean los planes de rescate y estímulo para ver si la situación se reconduce. Lo único que se consigue es dedicar el 27% del PIB mundial, (J.Muns), por parte de los estados y los Bancos Centrales. Esto significa que de toda la producción mundial en un año, el valor del 27% no se utiliza para generar riqueza y desarrollo, sino para rellenar el agujero que los bancos tienen, por cierto que sólo ellos lo cavaron. Lo que no acabo de comprender es para que querían un zulo, ¿acaso nos iban a mantener secuestrados en él a todos?

A grandes males, grandes remedios. Claro que los no beneficiados siempre son los mismos.
Pero para Paul Krugman y Joseph Stiglitz, no ha sido suficiente, aunque no saben poner valor al “nivel de recursos a utilizar para obtener una reactivación vigorosa y  firme.”    ( J.Muns)

En esta vorágine se acentúa el desajuste económico entre los beneficios sociales y los privados.

Los Bancos que, como sabemos, no tienen dinero, van al mercado interbancario, dónde entre ellos se prestan dinero, pero como hay desconfianza, o no se lo prestan o a un tipo cada vez más alto.
 
Al mismo tiempo, las empresas, entidades sociales que proporcionan salario (dinero) a cambio de trabajo, se encuentran que no disponen de dinero, crédito o financiación, para desarrollar su actividad, para ir creciendo, generando bienes y servicios y vendiéndolos. La actividad económica de las empresas cae. Los mercados no absorben la producción de las mismas.
La repercusión económico-social se manifiesta en el cierre de empresas, con el consiguiente aumento del paro.
La crisis que empezó siendo del sistema bancario ya afecta a las empresas y por tanto a las familias.
Este es el pez que se muerde la cola. Si no hay trabajo, no hay salario. Si no hay salario, no hay consumo. Si no hay consumo, las empresas no venden. Si la empresa no vende, no produce. Si no hay producción,  no hay trabajo.
Y vuelta a empezar.

Hasta cuando va a durar esta situación. Ni se sabe. No lo sabe nadie, ni los que dicen que saben más, ni los ignorantes reconocidos, que tal vez son los mismos.
 
Pero entre tanto los desequilibrios crecen. Economías como la China están cada vez más pujantes, aunque no considero que sea imitable, por lo que conlleva en su “éxito” de abuso de los trabajadores, a todos los niveles, desde el económico, a la seguridad, a los servicios sociales,… No cambiaría la crisis por sus “beneficios”. Pero sufrimos las consecuencias.
Por un lado nos inundan de productos a bajo precio, que nosotros, el mundo “desarrollado” compramos cerrando los ojos a la conciencia que nos va recordando la explotación de los trabajadores chinos.
Ven aumentados sus ingresos, su economía crece y sus ahorros también.  Con lo que puede permitirse invertir en la deuda de los países occidentales, mientras que ponen impedimentos a la inversión exterior en China.

La crisis es global pero no se percibe igual en Asia, EE.UU. o Europa, incluso en la Unión Europea soplan vientos distintos según los países.
Al inicio de la crisis Alemania bajó los salarios entre un el 2000 y 2008 en un 0,8% y un fuerte aumento de la productividad, (A. Robinson). En los países periféricos de la zona euro el incremento salarial fue hasta 2010 por encima del 10%, la cual cosa explica el enorme superávit comercial de Alemania, que lo lleva a cabo fundamentalmente con los países de la zona euro. Dado que el comercio exterior en Europa es entre sus propios países, resulta difícil que se genere crecimiento. Una posible ayuda consiste en las devaluaciones internas: bajar los salarios e incrementar la productividad. Todo ello con gran rechazo social.
De igual modo el reparto del trabajo entre los muchos trabajadores, con la consiguiente reducción salarial (minitrabajo-minisalario), algo que no se está aceptando por las distintas  fuerzas sociales, sindicatos, empresarios, trabajadores. Son los llamados miniempleos. Todo ello viene respaldado por la experiencia alemana.
Mientras Alemania se erige en líder de las posibles soluciones, eso sí, siempre con planteamientos que no la perjudiquen y si es posible la beneficien.

No hay comentarios:

Publicar un comentario